Con la segunda quincena de julio a la vuelta de la esquina, llega el momento de las tan ansiadas vacaciones para muchos. Pero antes de emprender un viaje en coche es muy importante que pongas a punto tu vehículo para no tener sorpresas por el camino. Así que si te vas de vacaciones en coche, te recomendamos que lo lleves a tu taller de confianza para que te hagan una revisión y asegurarte de que todo está en orden.
Así podrás salir de viaje tranquilo y evitar cualquier imprevisto o susto que te haga perder tiempo y retrase tus merecidas vacaciones. Un coche en perfecto estado es sinónimo de seguridad, y si te vas de viaje la seguridad es lo más importante. Entre los elementos que debes tener en cuenta a la hora de hacer la puesta a punto de tu coche están:
1. Llaves:
Comprueba que las llaves funcionan correctamente y llévate las de recambio por si acaso. No sea que te fallen estando de vacaciones y tengas que perder tiempo para solucionar el problema.
2. Luces:
Asegúrate de que no tienes ninguna luz fundida y que están bien reguladas. Tanto las de posición como las cortas y/o largas. Y no te olvides de poner bombillas de repuesto en la guantera por lo que pueda pasar. Persona precavida, vale por mil.
3. Neumáticos:
Es importante que revises, tanto su estado de desgaste, como la presión de los neumáticos. Para saber si las ruedas están demasiado desgastadas y necesitan un cambio, revisa los indicadores en la banda de rodadura y si están a ras del testigo es que es hora de cambiarlos. También debes mirar que no tengan ningún desperfecto como abolladuras, cortes o desgaste irregular. De todas maneras, lo mejor es que lo revise tu mecánico, él sabrá cuando es necesario que las cambies. A veces con un sencillo parche es suficiente, aunque esa decisión siempre es mejor que la dejes en manos de tu mecánico.
Hoy en día todos los coches indican si es necesario aumentar la presión de los neumáticos, y en función del modelo de coche la presión que necesita tu vehículo será superior o inferior. Eso dependerá del peso del coche, entre otras cuestiones. Lo importante es que lo revises antes de salir de viaje.
4. Aceite:
Sobre todo, ten en cuenta los kilómetros que te indicó el mecánico para el próximo cambio de aceite. Circular con un aceite quemado y en malas condiciones puede provocar graves averías en tu vehículo. Pero además, también tienes que asegurarte de que el nivel de aceite es el correcto.
5. Frenos
Tendrás que prestar especial atención a las pastillas y discos de freno, si están desgastados o en mal estado provocarán que tu coche no frene bien. Y como lo que queremos es evitar sustos y tener un viaje tranquilo, asegúrate de que están en perfectas condiciones. A parte de esto, deberás comprobar el líquido de frenos.
6. Limpiaparabrisas
Aunque muchas personas no prestan especial atención al líquido del limpiaparabrisas, es uno de los líquidos más importantes del coche. ¿Por qué? Imagínate que vas conduciendo por la autopista y de repente te cae barro en la luna delantera procedente de un camión. Si no tienes agua en el limpiaparabrisas, no verías nada ¿verdad? Y si no ves nada, ¿cómo vas a conducir con seguridad? De ninguna de las maneras, correcto.
7. Anticongelante:
Del mismo modo que ocurre con el aceite, el líquido de frenos y el del limpiaparabrisas, el nivel de anticongelante también hay que revisarlo.
8. Bujías, filtros y cables
Las bujías se ensucian con cierta facilidad y si haces muchos kilómetros con las bujías sucias, puedes tener problemas a la hora de arrancar. Revisar los cables y filtros también es necesario.
¡Ah! y recuerda tener en el maletero todos los elementos auxiliares obligatorios. Como: chalecos reflectantes y triángulos de emergencia por si tienes que parar en el arcén ante un pinchazo o imprevisto de cualquier otro tipo, rueda de repuesto y gato para poder cambiar la rueda en caso de ser necesario y no tener que llamar a la grúa para que te lleve el coche al taller más cercano.
Ante todo, lleva el coche al taller para que hagan una revisión a fondo y te hagan la puesta a apunto que necesita tu coche antes de emprender el viaje. Y una vez todo revisado y controlado ¡a disfrutar! ¡Buen viaje!